En un apasionante encuentro argentina igualó 2 a 2 con Australia, último campeón del mundo y número uno del ranking de la Federación Internacional.
El resultado es importante no sólo por la magnitud del rival, que venía de golear en las primeras fechas, sino que también lo es porque permitió sumar las primeras unidades en el Grupo A.
En el encuentro, los de Oceanía abrieron el marcador en su primera ofensiva clara, al capitalizar una jugada fija a favor por medio de Matthew Butturini.
El seleccionado argentino estuvo a poco de igualar segundos después, pero el desvío de Santiago Montelli tras una veloz ofensiva nacional no fue preciso y se fue apenas afuera. El delantero de Lomas repitió la jugada un poco más tarde, nuevamente sin resultados positivos.
El combinado nacional supo tener la pelota e intentó lastimar con ofensivas rápidas y juego vertical. Los campeones del mundo, en tanto, estuvieron siempre al acecho, penetrando el círculo nacional en un choque que se tornó de ida y vuelta.
A poco del descanso, el portero Juan Manuel Vivaldi contuvo en el segundo corto tres remates consecutivos directos a puerta y evitó así un nuevo tanto australiano.
Pero luego de un error defensivo, Jamie Dwyer empujó la bocha debajo del arco para el 2 a 0 a segundos de la chicharra.
En el inicio del complemento, el Seleccionado nacional encontró un rápido descuento tras una ofensiva encarada por Lucas Rossi y definida por Matías Vila.
El choque se mantuvo dinámico y con constantes penetraciones de ambos a los círculos rivales.Si bien Australia se mostró con un mayor peso ofensivo, Argentina supo incomodar a la última línea oceánica en varias oportunidades.
La falta de precisión en la definición fue un factor común entre ambos, aunque vale aclarar que los porteros también fueron los responsables de que el resultado no cambiara; sobre todo Vivaldi bajo los tres palos argentinos.
Finalmente, a falta de dos minutos, Gonzalo Peillat rompió la mala racha y capitalizó el único corto argentino del complemento para el empate definitivo.
El punto sumado ante Australia tiene un gran valor desde lo anímico para el Seleccionado nacional por la magnitud del rival y también permite seguir con chances de pelear por el quinto lugar, objetivo planteado por el primer equipo masculino antes de partir hacia los Juegos Olímpicos.
Para lograrlo, Argentina deberá sumar en sus próximos compromisos y, por lo pronto, en la cuarta fecha deberá enfrentar a España desde las del domingo en nuestro país.
